sábado, 26 de marzo de 2011

Poesía y canción con Cacho Castaña

     Cuando leemos poesías pensamos que sólo es posible darles vida con la lectura pero no es así.  Cuántos  cantantes han musicalizado poesías de Neruda, de Benedetti y tantos otros. Así también como tantos compositores han escrito canciones de difusión popular, a veces baladas  cuya temática abarca desde la vida en las ciudades y los problemas de los jóvenes hasta preocupaciones del orden social. 
     Dejo a tu consideración  la letra de la poesía canción Septiembre del 88 que compuso Cacho Castaña. ¿Por qué esa canción? Porque siempre me agradó. ¿Por qué? Porque siembra y renueva la esperanza de que cada día que amanece será mejor para todos. Me hace pensar en otro tiempo, por ejemplo en el 24 de marzo de 1976. Un tiempo en el que muchos argentinos crecimos junto a nuestros padres pero otros no pudieron. Algunos de nosotros no sabíamos qué ocurría, percibíamos el miedo, un ingrediente cotidiano en nuestras mesas, tanto que nos pareció normal su existencia. Siempre había que pensar dos o más veces antes de hablar o de objetar algo pero era mejor no hacerlo (así nos aconsejaban los mayores). Sin embargo, el tiempo transcurrió. 
     En 1983  recuperamos la democracia, una forma de gobierno con aciertos, con errores pero que nos permite, siempre, decir lo que pensamos y disentir. Fue entonces el tiempo de hablar y de objetar pero no estábamos acostumbrados. Fue necesario re-aprender a vivir.       
     Hoy, 2011,  es nuestra obligación ejercitar la memoria por aquellos que no están. No  porque no lo deseen, sino porque no se lo han permitido. Es cierto que  otros argentinos se marcharon en busca de espacios que les permitiesen vivir sin temores pero llenos de nostalgia y  afrontando el  desarraigo. ¿Podemos reclamar por eso? Yo creo que es tiempo de:


Mirar al pasado para conmemorar
y  aprender de lo  vivido.
Mirar el presente para apreciarlo
y  disfrutar de él 
 y mirar el futuro
para soñar
con un mejor mañana.


   
Septiembre de 1988, Buenos Aires, Argentina.


Querido amigo:  Recibí tu carta de Italia
y me alegra mucho saber que, que todo está bien.
Aquí la cosa sigue igual, no es tan transparente.
La crisis se pasea por las calles
y la tristeza del pueblo
es como un barco que no llega a destino.
¡No sé que pasó! ¡No sé cómo fue!
Pero no te vuelvas,
te diré por qué.
Si vieras que triste que está la Argentina,
tiene la mirada de los caminantes que ya no caminan.
Se muere de pena por tanta mentira,
de tanta promesa por nadie cumplida.
Si vieras sus calles que tanto reían
ya no son las mismas.


Si vieras que triste que está la Argentina,
tiene la nostalgia de aquellos amantes
que nunca se olvidan.
La hicieron de goma, parece mentira.
La gente se escapa pero no hay salida.
Y hasta los gorriones, de tanta tristeza,
se fueron de gira.


Septiembre de 1988, Buenos Aires, Argentina.


Querido amigo:
Se me acaba de volcar el mate sobre
la carta que te iba mandar.
Por eso te vuelvo a escribir.
Me alegra mucho saber que te va bien.
Aquí la cosa sigue igual.
Pero, de una manera u otra,
vamos a salir adelante.
Hay algo que no se debe perder nunca,
y es la esperanza.


Si vieras que linda que está la Argentina,
tiene la mirada de la primer
novia que nunca se olvida.
Desde los balcones llueven las glicinas
y a pesar de todo, camina y camina.
Si vieras de nuevo que linda y que
grande que está mi Argentina.


Buenos Aires sigue llena de gorriones,
hay nuevos poetas que escriben sus tangos
y hay nuevos cantores.
Y sigue teniendo la vieja locura
que al doblar la esquina haya una aventura.
Ya ves: sigue viva y, a pesar de todo,
llena de ternura.


Si acaso te encuentras con otro emigrante
decile que vuelva, que
pronto seremos mejores que antes.
Que todo fue culpa de cuatro atorrantes,
que sólo lograron que el pueblo no cante
Volvé cuando quieras que juntos
podremos salir adelante.


Cacho Castaña
Fuente: musica.com

jueves, 10 de marzo de 2011

Ivonne Bordelois y el lenguaje

   Etimología de las pasiones afirma:
       "La escucha del lenguaje significa entender y aceptar - por muy misterioso que esto nos resulte- que antes de hablar entre nosotros, y como condición esencial para poder hablar entre nosotros y con nosotros mismos, nos comunicamos y nos sentimos comunicados con el lenguaje, que es el don más alto y profundo que se nos ha dado como especie..."
   El ser humano vive el día a día. Siempre preocupado por si le alcanza el dinero, si tiene para pagar la luz, el agua, el teléfono y tantas cosas más que va sumando porque él lo necesita, porque sus hijos lo necesitan, porque lo piden o porque él piensa  que es así Pero, qué ocurre en ese transcurrir la vida. Ocurren muchas cosas y siempre el lenguaje es el vínculo.  Si lo utilizamos creamos lazos, si dejamos de hacerlo, se levantan los muros que a veces se transforman en terribles fortalezas. Yo siempre me pregunto por qué y siempre me viene a la mente un poema de Cecilia Roggero, una poetisa peruana, que habla del signo verbal. Lo   compara con elementos de la naturaleza, con emociones, ... Sintetiza sabiamente su pensamiento que hoy hago mío y los invito a hacer lo mismo:


Palabras
Hay palabras redondas
como mundo,
como hueco,
como sol

Hay palabras que acompañan ,
como luz,
como perro,
como sombra.

Hay palabras que lloran
como lluvia.

Hay palabras amargas,
como tónico,
y difíciles
como lo siento.

Hay palabras grandotas
como castigo,
o como grito.

Hay palabras que ríen,
como agua, como circo.
Y las hay tristes,
como fin.

Hay palabras y palabras.
hay las que se dicen
y las que se callan.
Hay las que duelen
y las que alegran
y las que abren puertas
misteriosas.

   Cuando leo este poema pienso cuán importante es el lenguaje. Podemos ofender hasta lo más íntimo de un ser humano así como elevar su autoestima hasta el infinito. En nuestras manos está su progreso y comienza en el lenguaje.